martes, 27 de julio de 2010

EL CHIMAYCHE

EL CHIMAYCHE:

EL CHIMAYCHE.
Etimología: Chimaychi (terminado en “i”) deriva de la palabra “Chimaytsi”, que se origina de las voces:” Chimay”, que significa adivinar; y la terminación “tsi” que denota “dejar que otro realice la acción del verbo”. Por lo tanto “Chimaytsi” significa “hazlo adivinar”.Los yanaminos decían que el Chimaychi era el baile de los adivinos. Entonces podemos concluir que la etimología coincide con la información de los yanaminos.
En Pomabamba, siempre al hablar de música se suele decir “WAJGATSI”, palabra que se origina de las voces: WAJGA=LLORAR y la terminación “TSI”=lo haces llorar o hazlo llorar. En música significaría “HAZLO TOCAR A LLORAR EL INSTRUMENTO MUSICAL”, por eso a los músicos nos dicen “WAJGATSI VIOLINNIKITA, ARPAIKITA, GUITARRAIKITA, FLAUTAIKITA…”, que traducido al castellano significa: “HAZLO LLORAR A TU VIOLÍN, A TU ARPA, A TU GUITARRA, A TU FLAUTA…”. Como diciendonos “adivina si llora mi corazón”. El Chimaychi desnuda al corazón.
En nuestro Chimaychi, por ejemplo el violinista “hace llorar al violín”, actitud con la que adivina el sentimiento y las emociones del que escucha. Es por ello que cada vez que se ejecuta el Chimaychi, especialmente el violín comienza “llorando”, así: “WA……..JGAY….! AY!,!AY!!AY!!AY!!AY!...
Es así que nuestro Chimaychi, se constituye por ser un género sentimental, romántico y cariñoso. En nuestros pueblos aledaños cuando alguien fallece, las mujeres lloran con esta misma entonación musical. Por todo esto el chimaychi ha calado hondo en el corazón de nuestras hermanas provincias de Ancash y hasta a nivel nacional y por qué no decir a nivel internacional. El chimaychi es el único género que adivina lo que está sucediendo dentro del corazón de las personas que lo escuchan.
El chimayche es de gran influencia en nosotros los seres humanos.Tiene el poder de calmar, conmover y levantar el ánimo.Con mi chimayche, yo expreso mis lamentos, tristezas, penas y alegrías. Es el lenguaje universal tanto en mente como en corazón. Para nosotros los compositores, músicos y cantantes, es el mejor regalo de Tayta Dios.
Nosotros los pomabambinos hemos escuchado el chimayche desde el vientre de nuestra madre, pasando a ser arrullados en la infancia con canciones como el “Ichic Sixto”.En la adolescencia, justo cuando el romanticismo inunda nuestros corazones, la presencia del chimayche es precisa y llegada la adultez nos relaja escuchar aquellos chimaychis de antaño, después de un arduo y cansado día de trabajo.
Nuestro chimayche es la viva expresión de nuestra cultura e historia pomabambina.Nuestras principales fiestas las conmemoramos a son de violín, arpa, flauta y chimayche.Tal es el caso del chimayche “Ichic Sixto” el mas antiguo, el mas popular y el mas bailado, incluso inseparable de nuestro huanca y de otras comparsas pomabambinas, refleja la acción del pregonero que es matizada con la broma y la picardía propia del pumapampino. Esta canción queda en la memoria junto al pregonero que hoy día ha sido reemplazado por los medios de comunicación de mayor trascendencia tecnológica.
Hay un proverbio español que reza que “de medicina y música, todos sabemos algo”. Por ejemplo la voz es un instrumento musical diseñado por Dios en cada ser humano, pues tan solo con abrir la boca estaríamos cantando y si somos constante en la práctica es probable que mejoremos.
Cuando estamos tristes, nuestra voz se manifiesta quebrada, y si estamos felices y contentos la voz se hace clara y sonora; hecho por el que podemos concluir, que la voz está en contacto directo con nuestro corazón, el sitio donde están las emociones más profundas. Por esta razón el canto libre y espontáneo es el más preciso para disfrutar. Este aspecto no explicaría bien si no hubiese escuchado a nuestra Estrellita de Pomabamba, Nila Villanuesva Carranza, quien para mí es la voz que distingue nuestro chimayche del resto de los géneros musicales. El trinar de su voz, a cuantos corazones hace vibrar, la melodía de su canto a cuantos corazones hace soñar, y el sentimiento de su voz a cuantos corazones hace quebrar. ¿acaso al que está triste no lo hace bailar? Nuestro chimayche es una poderosa arma de influencia. Nuestros antepasados jamás le dieron mal uso, al contrario compartieron siempre este género con Vilcabamba, localidad con la que no solo la geografía nos une, a pesar de que la política nos haya separado.
El tema musical más legendario en este género es ICHIC SIXTO, diseñado por el gran compositor pomabambino don Francisco Obregón Moreno, más conocido como “Ichic Pancho”, a incios de del año 1900, en la nota musical de Re menor, nota que conserva la escencia del chimayche, por su perfecta posición en el violín, posición que no debe ser descuidada por el violinista, cuando este ejecuta un chimayche en otra nota musical. El chimayche es complemento exacto del otro género auténticamente pomabambino que es el huanca. Por ello es estrambótico escuchar un chimayche en otra nota musical, que no sea RE menor, por la sencilla razón de que no se convierta en otro género musical pomabambino tambien, que es el “Negrito”. Para demostrar el caso, que me disculpen mis compañeros cultores, de que solo he escuchado chimayche, casi en su escencia total en Nila Villanueva Carranza entre arpa y violín, digo casi, porque solo faltó percusionar con el característico zapateo de los huancas, digo casi porque el violín en los remates se desvió hacia el famoso “Negrito”. También solo escuché el magestuoso violín del gran Máximo Rivero “Paiche”, en su debida posición de chimayche, a pesar de estar acompañando en la nota musical de SI menor, al cantante pomabambino Víctor Estrada León.
No hay chimayche sin arpa y violín, sin flauta traversa pomabambina y zapateo, sin la posición de Re menor, aún estando en otra nota. Ese legado nos viene de los antepasados. Desde sus pioneros don Carlos Capillo Moreno, en el violín, de Comunpampa y don Raymundo Picón Torres “Tayta Llimu” de Vilcabamba, en el arpa. Ellos hicieron historia en la Pampa de los pumas, siendo recordados por haber ganado el primer puesto en el concurso departamental realizado en la ciudad de Huaraz en el año de 1929 y el concurso nacional de Amancaes en la ciudad de Lima en 1932, por supuesto ganadores entre los danzantes huancas, de alegría, garbo y elegancia; entre infinitos aplausos y vítores, al son de nuestro chimayche.
Generación viene y generación se va. De estos dos grandes cultores y pioneros, descendieron don Sebastián Carrión Vergara, más conocido como don “Shihua”, violinista vilcabambino y don Tobías López Sánchez de pomabamba, cariñosamente llamado “Chanco”, puesto que fue él quién desarrolló la escencia del acompañamiento del arpa en el chimayche, como si este instrumento en sus bordoneos dijera “chanco”, “chanco”, “chanco”, “chanco”, onmatopeya que ningún bajo electrónico ni la más sublime guitarra de cajón del magistral Quiptina podrán imitarlo. ¡Cómo olvidar al maestro Shihua!, como él nadie en el violín, decían Ricardo López “El chanco”, hijo de don Tobías López Sánchez y Máximo Rivero “Payche”, sus discípulos que no pudieron superarlo, porque él tocaba con corazón a corazón.
En la tercera generación de nuestro chimayche cabe mencionar a Ricardo López Matos “Chancu Llica” de pomabamba, en el violín; y don Faustino Tarazona “Don Fabuchu” de Angascancha, en el arpa y desde su muerte, el profesor Eugenio Villanueva Picón de Vilcabamba, tambien en el arpa; quienes continuaron en la escencia de este género. Paralelamente a ellos Máximo Rivero “Payche” de Pomabamba y Manuel Tarazona “Ishu” de Angascancha, hijo de don Fabuchu, mantenían el ritmo, la cadencia, la elegancia, es decir la misma escencia del chimayche auténtico, en Lima, la ciudad capital. Un día don Emiliano Meza Sánchez, guitarrista de antaño, hermano de don “Chanco Tobías” le comentaba a mi padre don Marino López, de que Payche tocaba el violín como el maestro “Shihua”. Por esta razón debemos aprender de Payche el verdadero chimayche en el violín, y cuánto me gustaría que diga él, que tal o cual son los sucesores del chimayche, en la cuarta generación; sin embargo mientras Payche viva seguirá siendo inalcanzable en la escencia de este género musical.
Empero con la anuencia del maestro Máximo Rivero “Payche”,mención de honor para los siguientes violinistas que cultivan nuestro chimayche: Éberth Álvarez Salinas, Néstor Flores, a los integrantes del Conjunto “Amanecer Andino de Chuyas”, Pablo Santiago, “Los amigos chimaycheros de Puyaupampa”, Dimas López Cercida “El chanquito” hijo de don Ricardo López Matos , Pedro Bermúdez y otros. Para quienes queda la recomendación, si me premiten, no confundir Chimayche con el género Shitga, y tampoco confundir el compás, el ritmo, el tiempo musical del Chimayche con el compás, tiempo y ritmo de otros géneros musicales. Recordarles que el bajo electrónico terjiversa la esencia del chimayche, como suele torcer el timbal el oportuno acompañamiento del zapateo.
Entre los danzantes del Chimayche, me quedo, por su porte, elegancia y belleza masculina, con los siguientes ejecutores: Julio Guzmán Moreno, Inocente Moreno Flores, Moisés Vergaray Sotomayor, Alois Ponte Negreyros, Téófilo Aramburú Rojas, Tiushu Zavaleta, Moisés Zavaleta, Antonio Vega “El Chino”, Lucho López López “El Zorro Pomabambino” y otros que escapan de mi memoria ingrata, que me perdonen tambien por olvidarlos involuntariamente.
Hoy en día muchos intérpretes confunden el chimayche con el género “SHITGA”, que por supuesto ¿a qué pomabambino no le gusta “Shitga picante” con su papa y cancha?. Es así que este género por su sabor tentador gusta mucho, por algo se denomina “Shitga”. Sin embargo no debemos cometer el tremendo error de denominar al “Shitga” como “Chimayche”, Chiamyche es elegancia, garbo, decencia, respeto, pulcritud, finura, sueño, ilusión, pasión, arpa, violín y zapateo. Encambio el género“Shitga”, es más picardía, broma, hasta burla, mas carnal que romántico, más diversión que belleza, hasta sexual, no tanto como el perreo.Es decir habla de shojshinacuy, sutanacuy, pajchinacuy; habla de “repollo huma”, “oronguinaupis mishqui siqui”, así por el estilo. Por ello no confundamos chimayche con shitga, ni shitga con chimayche, son dos géneros distintos.
Debemos tener mucho cuidado con nuestro género, para no darle mal uso, especialmente los compositores, ya que componer para mí significa construír. Hay canciones que por ejemplo incentivan el odio, el nacionalismo, el divisionismo, el suicidio, la pornografía, el erotismo, el alcoholismo y la perdición. Hecho que nos hace ver de que en este mundo no solo estamos los compositores, tambien hay descompositores o destructores de la sociedad, la juventud y la niñez. ¿Acaso no se llenan de dinero a manos llenas, aquellos que han sexualizado la música? Y como producto de ello ¿acaso no han aumentado más madres adolescentes? Si las autoridades no hacen nada, los compositores estamos en la obligación de componer y no destruír.
Algunas melodías hermosas disimulan letras desagradables que restan importancia a temas como el odio, la inmoralidad y la violencia, fomentando lo malo. ¿Deberíamos de entretenernos con esta clase de música? Por favor cuidemos nuestro chimayche y otros géneros.
El chimayche también es terapeutico, como suele suceder en otras culturas, por lo que puede proveernos de salud y bienestar. ¿Acaso cuando cantas no vibra todo tu cuerpo? Y luego de cantar el cuerpo se relaja y esto puede calmar el dolor.
Por esta razón se recomienda a los paisanos que radican fuera de Pomabamba y a los que sufren de estrés que escuchen nuestros chimayches. Si hay algún pomabambino postrado en la cama de un hospital llévale chimayches en un CD de audio o en un MP3. Los médicos dicen que los bebes prematuros y los pacientes operados suelen reaccionar bien a la música agradable como el chimayche.Nuestro género es relajante y puede reducir significativamente las hormanas del estrés.
En las pomabambinas embarazadas, el chimayche disminuye la ansiedad, porque favorece la relajación durantre el parto.
El chimayche por ser un maravilloso regalo de Dios tambien lo debemos utilizar para agradecer y alabar a Dios y disfrutar de su beneficio espiritual. La Biblia dice que Jesucristo, una noche antes de su muerte entonó alabanzas junto con sus apóstoles. Si nuestra música nos permite expresar nuestras emociones y si ella inflúye en nuestros corazones, tratemos y cuidemos bien este maravilloso don de Papá Dios.
De los cantantes la voz del chimayche es Nila Villanueva Carranza “Estrellita de Pomabamba”. Por su aspecto erguido, su postura relajada, cabeza arriba elevando su pecho y su mirada defrente hacen fluir con facilidad su voz cantante, explicando el truco o secreto para cantar con belleza.El canto es parte de ella, el instrumento que ella domina cuando arpegia con suavidad sus cuerdas vocales. Don Eliseo Román Pimentel, se maravilla cuando ella tensa sus cuerdas, estrechando la glotis las hace vibrar. Como ingeniero él dice: matemáticamente “a mayor número de vibraciones, los sonidos son más agudos, y a menor número de vibraciones los sonidos son más graves”. Una hermosa voz es un don de Dios. Su cuerpo es una caja de resonancia. Dicen los especialistas que los huesos del torax aumentan la intensidad de las notas más graves, y la mandíbula y las cavidades faciales aumentan la intensidad de las notas más agudas.
Muchos creen que Estrellita solo canta con la garganta, más si tú la observas bien, ella canta con todo el cuerpo, a pesar de su contextura delgada! Esto es increíble!
Gracias a Dios nuestros cantantes del chimayche recibieron la voz cantante como un don. Esto evitó los excesos como en el caso de la ópera, en sus períodos oscuros los castrati dominaron este género por más de un siglo. Los cantores para preservar sus voces agudas eran castrados antes de la pubertad; y con esto alcanzaban una potencia vocal.
Por todo esto Nila Villanueva se ha convertido en Estrella, más que Estrellita. Pomabamba la admira y le ha erigido un monumento, la llaman “La Diosa Morena” “La Diva” “La Reyna del chimayche”, más ella con humildad siempre se sometió a este género. Si alguna vez la escuchas cantar un chimayche, piensa en todo el esfuerzo, la disciplina y la dedicación que hay detrás de su bella voz, precioso eslabón entre letra y melodía, entre ritmo y poesía.
De las voces del chimayche, acompañan hoy con calidez; Marita Meza, Pascual Azaña, Chinita Cordillerana, Canario pomabambino, Crucita de Pomabamba, Víctor Estrada, Anita Fajardo, Zorro pomabambino, Betty Villanueva, Jorge Álvarez Matos, Victoria Gómez, Liliana Gutiérrez y otros que olvido, que me perdonen.
No debemos olvidar que chimayche es encanto, felicidad, sonrisa, garbo, elegancia del varón con el poncho y la mano izquierda echados hacia la espalda, más la mano derecha hace la figura del 8 con la punta del poncho similar al inicio de una marinera, y la dama con la manta ceñida a la cintura tambien dibuja hacia los aires el ocho con la punta de su manta, pero con la mano izquierda.
A continuación pongo a disposición de nuestros interpretes estas canciones inéditas, de este su humilde servidor, espero que les guste, y si lo van a cantar o editar, no olviden consignarme como autor, es decir no me arrebaten a mis hijos, toda composición para su autor es como un hijo.
¿CÓMO SE COMPONE UN CHIMAYCHE?
Como hemos dicho antes, utilicemos un modelo a seguir. Nuestro chimaychi modelo será, nuestra canción mas antigua, además es el primero en su género. Y fíjense, el primer chimaychi y el más antiguo es pomabambino y compuesto por un pomabambino, por DON PANCHO OBREGÓN, más conocido como “Ichic Pancho”, además habla de nuestro mirador “Buena Vista”, pues se trata de nuestro chimaychi emblema “ICHIC SIXTO”. A propósito ¿Quién era “Ichic Sixto?, era nada más y nada menos que don SIXTO PONTE, asiduo devoto del Señor de los Milagros, imagen al que cargó y trasladó a pie, desde la iglesia Las Nazarenas de Lima a Pomabamba, en vista de que en esa época no existía carretera que nos interconectara con la ciudad capital y así consagró a la imagen en la Capilla de nuestro mirador de Buena Vista. Cuenta la tradición pomabambina que don Sixto Ponte, trasladó dicha imagen en tan solo un día solar. Por su pequeña estatura, cariñosamente el también Ichic Pancho, le tituló en su tema, como Ichic Sixto.Sin más preámbulos, vayamos a la composición.